sábado, 28 de febrero de 2015

¿Te gusta conducir...?

Ese eslogan acompañaba un anuncio de una conocida firma automovilística teutona en el que se mostraban imágenes de absoluta paz y tranquilidad al volante, todo en medio de una atmósfera muy chill-out. Resulta paradójico, teniendo en cuenta lo irritante que es la conducción en este país. Supongo que aquello no lo rodaron en carreteras alemanas, porque no podría estar más alejado de la realidad.


Salir a la carretera en Alemania significa enfrentarse a todo un compendio de obstáculos y peligros que acechan, lo cual no puede catalogarse precisamente como agradable. No es casualidad que, entre mis primeras palabras en alemán, muchas fueran relacionadas con este tema, ya que las escuchaba contínuamente en los frecuentes partes de tráfico radiofónicos. Por eso, pensando en los recién llegados, voy a hacer algo que no acostumbro: una pequeña selección de términos que, para quien se desplace en coche a diario, estarán en su vocabulario de cabecera:

Stau = atasco

La palabra estrella, sin duda. Imposible evitarlos. Es mejor aprender a convivir con ellos en sus distintas modalidades, como el típico "arranca-para", el colapso total o "de-aquí-no-te-mueves" o el peligroso "tapón súbito" que te encuentras de pronto ante tus narices y se disuelve tan repentinamente como apareció, sin dejar rastro de aquello que lo motivó.

Baustelle = obras

Una de las causas de atascos más frecuentes. Las carreteras alemanas están perpétuamente en obras. No importa por dónde vayas ni cuánto tiempo pase. Sencillamente son eternas. Cuando han acabado un trozo, empiezan el siguiente, luego el siguiente y el siguiente... Y cuando llegan al final, vuelven a empezar de nuevo desde el principio. Así que no albergues esperanzas de ahorrar tiempo de trayecto cuando terminen esas obras de camino al trabajo. No ocurrirá nunca.

Unfall = accidente

El otro gran generador de atascos. El elevado volumen de tráfico unido a la agresividad de los conductores hacen que los accidentes sean el pan de cada día. Una señal con la inscripción Ölspur (restos de aceite) suele ser indicio de un suceso reciente. Asusta ver las numerosas cruces que pueblan las cunetas recordando los más graves...

Umleitung = desvío

A menudo, cualquiera de las calamidades anteriores conlleva la necesidad de habilitar un desvío que permita proseguir la marcha. Pero, en ocasiones, es peor el remedio que la enfermedad, resultando tan insufrible el desvío como el atasco en sí...

Straßenglätte = helada en la carretera

La humedad y el frío propios del invierno provocan con mucha asiduidad placas de hielo en la carretera. Para combatirlas, se vierten ingentes cantidades de sal, que devorará el exterior de tu coche sin darte cuenta...

Straßenschäden = firme en mal estado

Esta es una circunstancia más común de lo que se espera en un país como Alemania. El clima y el denso tráfico son los principales culpables del deficiente estado en que se encuentran bastantes carreteras. Terreno abonado para realimentar la necesidad de las ya mencionadas obras...

Rasen = conducir a todo trapo

Cada alemán se cree el mejor conductor del mundo. Y se cree mejor cuanto más rápido y agresivo conduce. Además de ir deprisa, usan exclusivamente el carril izquierdo (el resto de carriles son para los "malos conductores"; por eso se quedan vacíos mientras el izquierdo está a rebosar...). Entre los que conducen más endiabladamente suelen estar vehículos de tipo familiar, muchos de los cuales son coches de empresa que van de servicio, por lo que no tienen reparos en pisarle a fondo con combustible a cargo del patrón... Sorprende también la cantidad de Smarts y Twingos que pueden verse despendolados a punto de levantar vuelo...

Lichthupe = ráfaga de luces

Cuando oses hacer una incursión en el carril izquierdo a una velocidad que no sea del agrado de quien te sigue, observarás como este empieza a ejercer una intensa presión sobre tu cogote al tiempo que muestra los dientes afilados. Si no te apartas en breves segundos, comenzará a echar espumarajos por la boca y te hará saber mediante ráfagas que eres un estorbo, y que está dipuesto a pasarte por encima si continúas impidiéndole mejorar su récord en el trayecto trabajo-casa.

Blitzer = radar de velocidad

Para aplacar ligeramente el ímpetu de las manadas motorizadas hay radares fijos y móviles sembrados por todas partes. Las emisoras de radio informan de la posición de algunos de ellos en los boletines de tráfico. Ojo. Las fotos que hacen son caras y no sales nada favorecido...

Falschfahrer = conductor que va en sentido contrario

Asunto muy peligroso. Prácticamente a diario pueden escucharse avisos por este motivo. El colmo del surrealismo se produjo hace unos años, cuando una mujer alertó desde la autopista de los numerosos vehículos que venían en dirección contraria. Obviamente, era ella quien iba al revés... Por suerte, la detuvieron antes de causar ningún accidente.

Además de todo lo dicho, en el asfalto puedes encontrarte muchas más cosas aún, como innumerables camiones averiados (defekter Lkw), todo tipo de objetos sobre la vía (Gegenstände auf der Fahrbahn) o múltiples animales sueltos (laufende Tiere). Precisamente entre estos últimos se encuentra el más temible de los peligros que aguardan en las carreteras alemanas :